domingo, 27 de marzo de 2011

LA FILOSOFÍA DE LA EDUCACIÓN

La FILOSOFÍA DE LA EDUCACIÓN
Sin duda alguna, la educación es uno de los aspectos más importantes para el desarrollo de una sociedad. Por lo mismo, se constituye como un agente de cambio y libertad para el hombre, esto demuestra la importancia implícita que debemos hacia la misma.
La filosofía es la reflexión  sobre lo existe, lo posible, la naturaleza, el hombre las causas, los fines, las relaciones entre el hombre y el universo, el lenguaje, entre otras. Con respecto al hombre asuntos tales como el origen y destino, problemas de la libertad, concepción del mundo, de las cosas y sobre la finalidad de la existencia.
La filosofía se constituye como la base de las diferentes posturas ideológicas habidas y por haber. La misma también es real para la Educación como práctica educativa.
La filosofía de la educación es la reflexión filosófica que trata sobre la esencia y el valor, la finalidad y el sentido, las posibilidades y los límites en extensión y profundidad de la educación. Explora de manera estructural, esencia, valores y fines del proceso educativo a efecto de dar explicaciones objetivas. Indaga los fundamentos últimos de la realidad pedagógica.
La educación como un quehacer ético en la actualidad, debe representar a la práctica educativa y a toda persona que esté involucrada en este proceso, reflexionando en ello desde una perspectiva filosófica. La educación se vuelve cada vez más un sistema mecanizado y sin compromisos sociales ni humanos; es necesario lograr una mejor comprensión del mundo y de la vida, y la educación es la mejor forma de generar actitudes positivas para hacer frente a los innumerables retos que nos ofrece el mundo actual.
La práctica de la educación debe estar en función de situaciones de fondo, en función de todo lo que forma conciencia, carácter, esencia en el hombre, esencia  de su práctica y de su finalidad; la transmisión de cultura humana, el hombre por esencia tiende a ser libre, aunque la cultura nos tenga atados a la predeterminación y por lo tanto a la pérdida de libertad, a la pérdida de la voluntad de elegir.
Sin duda que esta determinación (determinismo) es una herramienta muy importante en la ideología, puesto que puede servir para que el individuo crea que es su propia elección, que crea que él está siendo auténtico en su voluntad. En la educación, se debe promover la libertad , y en el determinismo podemos encontrar una tendencia muy tajante que no permite la elección (esto como crítica a las situaciones de manipulación: moral, psicológica, política, religiosa...) con lo cual el acto educativo pierde todo sentido y se convierte solo en informativo, sin aplicación a la realidad, a las vivencias, a la vida de cada quien; si el individuo no es libre, no es fácil que encuentre el sentido, el amor, el interés a la educación.
Es esencial para el hombre el poder elegir su destino: tener elección, en poder por medio de la voluntad convencerse de las conveniencias y las inconveniencias. La libertad es el camino hacia la identidad, hacia la moral, hacia la conciencia... sólo en la medida de que se sea libre, se va a tener la conciencia del mundo, se van a tener convicciones y el ejercicio de la ética puede prevalecer por sobre lo material. ¿Por qué? Porque en la medida que la libertad, que el ejercicio de la elección, el desarrollo de la voluntad sean reales, el hombre irá adquiriendo una relación mucho más estrecha con el mundo, puesto que creara en él el sentido de pertenencia y de compromiso.
Toda educación colectiva requiere una filosofía educativa. La educación es el arte de transmitir a las nuevas generaciones, los valores, el fundamento y el contenido de una cultura. Vivimos en una sociedad donde el maltrato, la violencia, la prepotencia y la irreverencia son características y aún motivo de orgullo para sectores que desean imponer a los demás sus razones.
Esta peculiaridad parte de la filosofía del “sálvese quien pueda” y “primero yo” porque la competencia es la amenaza que se cierne sobre los millones de mediocres que habitan este mundo; porque son los mediocres los que tienen que disputarse el lugar que no les corresponde por falta de méritos.
Lo que parece estar faltando en la educación convencional, es proveer a los educandos de principios morales y éticos y el reconocimiento de las aptitudes individuales para favorecer el potencial de creatividad propia de cada ser humano.
La filosofía educativa se centra en dos aspectos: la naturaleza del aprendizaje y el propósito de la educación; y todavía a pesar del estado de confusión y desorientación actual de los jóvenes, cuestiona la transmisión de valores morales.
Queda así expuesta la juventud a la sola influencia de una sociedad enferma, que se refleja en los medios de comunicación masiva, mostrando los excesos y el libertinaje como forma de vida.
En base a la lectura del presente texto, realice un análisis crítico sobre el tema.
                                                                                                                    MSc. Reyes Moreno